La mafiocracia es la que manda

José Luis Sampedro receiving his award of the Order of Arts and Letters - EFE

Por: Libardo Muñoz

"La democracia ha muerto, los pueblos no mandan, el poder ahora está en el poder financiero", dijo José Luis Sampedro, escritor, economista y humanista español, quien obtuvo el título de "Doctor Honoris Causa, de la Universidad de Alcalá de Henares en mayo de este año.

Sampedro declaró su indignación por el hecho de que todo el empeño de los gobiernos ha sido para defender y sostener al sector financiero, pasando por encima de la defensa de los Derechos de los Pueblos.

"El tipo de democracia que se practica en Occidente no sirve para nada", expresó Sampedro, quien además manifestó que el capitalismo en su expresión neoliberal es insostenible.

El caso de España es terrible, pese a las declaraciones cínicas de Mariano Rajoy. "La economía es irrescatable" dijo Sampedro. La banca española necesita unos 40 mil millones de euros, es decir, un "rescate", pero los expertos consideran que ese rescate lleva en sus entrañas una pérdida de autonomía, "tanto por parte de las entidades rescatadas como por parte de España en general".

El gobierno español se vería obligado a tomar medidas que harán imposible la vida de trabajadores y gente del común, por ejemplo, aumentar el IVA al 23%, aumentar la edad de jubilación, recortar salarios y mirar la posibilidad de más privatizaciones, en suma: el desastre social y una marcha hacia el abismo, una derrota del Estado Social de Derecho.

En consecuencia, se ven en el horizonte español y en el de otros países incluidos en el "rescate" como será el caso de Grecia, marchas y protestas del pueblo en las calles de Madrid, de Atenas, de Estados Unidos, Berlín.

El pueblo no está dispuesto a pagar la crisis de la banca corrupta, causada por las mafias que se tomaron los gobiernos en los países que giran en la órbita del Fondo Monetario Internacional y sus aliados de Washington. 

Ahora la mafiocracia es la que gobierna, incluida Colombia, donde el espectáculo vergonzoso que acaban de protagonizar el ejecutivo y el legislativo, tomado por los pillos del Congreso, es una verdadera afrenta a la democracia que hay que frenar con la movilización organizada de todo el pueblo decente.