El escritor colombiano José María Vargas Vila nació en Bogotá en 1860 y murió en Barcelona, en 1933, cuando le faltaba un mes para cumplir 73 años.
Desarrolló Vargas Vila una obra de claro sentido anti imperialista y condenatoria de las primeras satrapías que aparecieron en estas tierras.
Vargas Vila, apodado "El Divino", sufrió el exilio por su posición anti clerical, su ateísmo declarado y su postura anti yanqui, que se ve con más énfasis en "Ante Los Bárbaros".
Las élites conservadoras de Colombia junto con la iglesia católica intentaron ridiculizar y condenar al ostracismo la obra de Vargas Vila. En una época se prohibió su lectura señalándola de "pecaminosa", pero no pudieron contener la denuncia contra los atropellos de la plutocracia interna, respaldada por el capital imperial.
En este aniversario de su nacimiento, bueno es recordar así sea en forma breve, el carácter adelantado de este escritor, que en 1900 decía:
..."ellos han invadido a México, aprisionado a Cuba, a Haití, a Santo Domingo, conquistado a Puerto Rico y despedazado a Colombia y cometido el robo audaz de Panamá...
..."el águila azteca tiene ya una ala rota y aprisionada en el pico del águila sajona.
"las turbas hambreadas y esqueléticas que en diaria y dolorosa emigración dejan cada día las costas de Puerto Rico, anuncian al mundo cómo la raza invasora y rapaz, persigue, aniquila y destruye la pobre raza vencida, que se les entregó allí como un rebaño; ..."¡ pobres pueblos vendidos, no vencidos !
Vargas Vila deja en esa misma obra una salida de gran vigencia: "Prever o desaparecer; he ahí el dilema; y ¿cuál es la palabra de la previsión? Unión, unión de esos pueblos, todos bajo el estandarte glorioso de la raza; "Unión estrecha y fraternal de los pueblos todos de América Latina, hasta hoy ferozmente encelados y dispersos".
("Ante Los Bárbaros", 1900. Publicada en Roma, cuando aún no se habían cometido la agresión yanqui a Nicaragua, Haití, México y Santo Domingo. La edición sólo vino a cerrarse después de la Primera Guerra Mundial).
Sufrió Vargas Vila el exilio junto con otros colombianos como el bolivarense Diógenes Arrieta, con quien en Venezuela, fundó periódicos y otras revistas desde combatió a Rafael Núñez, de quien diría: "todo en él tuvo la densa oscuridad del abismo".
El pueblo raso siempre tuvo simpatía con Vargas Vila, Barranquilla fue una ciudad querida por el escritor donde en una ocasión una multitud de admiradores rodeó el hotel donde se alojó, de tal manera que se creó un problema de orden público.
José María Vila conoció en vida el éxito de sus libros, recorrió el mundo, dictó conferencias en las grandes universidades de su época, fue admirador de José Martí y de Simón Bolívar, dejó 108 libros y ganó buen dinero con sus obras que aún hoy se leen con avidez desde México hasta Argentina.